Cuando se contrata un seguro de decesos, es importante que se conozca todo lo que rodea a su funcionamiento, especialmente algunos conceptos básicos, como es el concepto de “carencia”. Un término que suele generar dudas y que, por su importancia, hay que entender para saber qué se está contratando y en qué condiciones. Así, evitaremos posibles inconvenientes cuando se tenga que utilizar este tipo de seguros.
En este artículo se explicará lo que es la carencia en un seguro de decesos y cómo afecta a los asegurados , además de detallar cómo funciona y los aspectos a tener en cuenta para entender qué casos se aplican y en cuáles no. ¡Sigue leyendo!
¿Qué es la carencia en un seguro de decesos?
La carencia de un seguro de decesos es el período de tiempo establecido por la aseguradora, desde el inicio de la póliza, en el que no se puede hacer uso de ciertas coberturas. Esto significa que, aunque el seguro esté contratado y vigente, algunas prestaciones no estarán disponibles hasta que concluya este plazo.
El objetivo de esta carencia es proteger a las aseguradoras de posibles contrataciones de último momento dónde lo que se busca es aprovechar los beneficios del seguro de manera inmediata. Por lo general, las coberturas afectadas durante este tiempo suelen estar relacionadas con el coste del servicio.
En cuanto a la duración del período de carencia en el seguro de decesos, esta varía según la aseguradora y el tipo de cobertura contratada. Hay compañías, incluso, que no establecen ninguna carencia, por lo tanto, todas las coberturas incluidas en el seguro de decesos estarán vigentes desde el mismo momento de la firma del contrato.
¿Cómo funciona la carencia en un seguro de decesos?
El funcionamiento de la carencia en un seguro de decesos se basa en un acuerdo entre el asegurado y la aseguradora, que se establece desde el momento en que se firma la póliza, que fija un periodo de tiempo en el que el asegurado no puede acceder a ciertos servicios de forma inmediata.
A continuación, se destacan los puntos clave a tener en cuenta en la carencia de un seguro de decesos:
- Coberturas restringidas: generalmente, la carencia afecta a las prestaciones más costosas, como los servicios funerarios, traslados, repatriación, etc. aunque puede variar según el contrato.
- Excepciones para casos específicos: algunas pólizas cubren ciertos riesgos sin aplicar ninguna carencia, por ejemplo, cuando la causa del fallecimiento es por accidente.
- Importancia de leer el contrato: es esencial revisar las cláusulas relacionadas con la carencia para evitar malentendidos sobre lo que incluye la póliza en sus primeros meses.
¿Cuáles son las exclusiones en la carencia del seguro de decesos?
- Suicidio: en algunas pólizas de seguros de decesos, los casos de suicidio suelen estar excluidos durante los primeros años de vigencia. Esto significa que, si el asegurado fallece por suicidio, dentro del período de carencia, es posible que las coberturas no se apliquen o estén sujetas a ciertas restricciones.
- Fallecimiento por causas naturales: el fallecimiento por causas naturales puede estar sujeto a un período de carencia. Durante este tiempo inicial, la cobertura suele restringirse únicamente a fallecimientos derivados de accidentes.
- Enfermedades preexistentes: en estos casos, si el asegurado fallece a causa de una enfermedad diagnosticada antes de contratar el seguro y dentro del tiempo estipulado por la carencia, la cobertura podría no aplicarse o estar restringida.
- Muerte accidental: esto implica que, durante un tiempo determinado, la cobertura podría estar limitada exclusivamente a muertes por causas no accidentales.