¿El seguro de coche te lleva el vehículo al desguace?

Barajar todas las situaciones que se pueden tener en la carretera con el coche es de vital importancia para elegir un buen seguro, y más en circunstancias que van más allá del pinchazo de una rueda (u otra avería leve).

Es el caso de accidentes en los que el coche queda siniestro y, por tanto, el único lugar al que cabe llevarlo es al desguace. Un contexto en el que se deben conocer las opciones disponibles para transportarlo a este emplazamiento y si, entre ellas, el seguro (por lo acordado en la póliza) será el que lleva el coche al desguace… o no ¡Sigue leyendo!

La respuesta es: depende del tipo de seguro que se haya contratado.

Si el seguro es “a todo riesgo”, lo habitual es que la aseguradora se encargue de indemnizar al asegurado (según lo pactado en la póliza de seguro) y de llevar el vehículo al desguace. Además, la gestión con el centro en el que se vaya a depositar el coche también corre a cargo de la compañía de seguros. En resumen, el seguro, en este caso, sí que lleva el vehículo al desguace.

Si bien es cierto que este tipo de seguro sí que facilita que se lleve el coche al desguace, también lo es que no todas las pólizas son iguales, ni ofrecen las mismas coberturas. Así, en el caso de que la póliza sea “a terceros”, el seguro no va a llevar el coche al desguace, tras el siniestro, siendo “tarea” del mismo propietario del vehículo.

Para ello, es importante que se ponga en contacto con el propio desguace, con el fin de saber cómo proceder según la normativa y cuáles son las opciones a disposición del consumidor.

¿Cuándo se considera que un coche está “siniestro”?

Antes de “comprobar” si el seguro lleva el coche al desguace o no, hay que saber si este, por su estado tras el accidente, es declarado “siniestro”.

A modo resumen, se considera "siniestro total” cuando después de un accidente el valor de la reparación de los daños del vehículo es superior al valor del propio vehículo. Y, de acuerdo con las condiciones de la póliza de seguro conllevará el pago al asegurado de una indemnización o bien la reposición del vehículo.

Pero ¿cuándo se declara un coche siniestro total? Para que un vehículo sea declarado como siniestro total, las reparaciones potenciales se estiman de un mínimo del 75% del valor venal del coche (aunque es cierto que hay aseguradoras que exigen que el coste de ese arreglo ascienda al 100% del valor del coche en el momento del accidente). Si los daños sobre el bien asegurado no llegan a ese valor mínimo y se pueden reparar, se calificará como siniestro parcial.

Si es uno mismo el que lo tiene que hacer, porque el seguro no lleva el coche al desguace, es importante qué se conozca la documentación a entregar al “entregarlo”:

• Ficha técnica del vehículo.
• Permiso de circulación válido.
• Copia del DNI o NIE del propietario.

Además de estos documentos, obligatorios para hacer efectiva la gestión, también es necesario firmar la solicitud de baja definitiva del coche (en todos los casos).

Según la Ley de contrato de seguro, el seguro de Responsabilidad Civil Obligatorio (RCO) es aquel que de manera obligatoria deben tener todos los vehículos que circulan por España. Este seguro cubre solo la responsabilidad civil hasta 70 millones de euros en caso de daños personales (por todas las víctimas) y hasta 15 millones de euros por siniestro en el caso de daños materiales.

Es muy importante no confundir el "seguro obligatorio" con los seguros "a terceros", ya que un seguro a terceros, aunque sea muy básico puede tener incluido otro tipo de coberturas adicionales a la RCO, como pueden ser, entre otras, Responsabilidad Civil Complementaria, Reclamación de daños o Defensa jurídica, Accidentes corporales del conductor y de los ocupantes y Asistencia sanitaria.

Cuando tienes el seguro "a terceros" y el culpable o responsable de los daños materiales provocados a su vehículo es uno mismo, la reparación de los daños correrá a nuestro cargo. Y, en el caso de sufrir alguna lesión, hay seguros que incluyen dentro de la cobertura de Accidentes corporales la indemnización por los gastos de asistencia sanitaria recibidos en caso de accidente (hasta el límite asegurado pactado en la póliza, por ejemplo, hasta 3.000 o 6.000 euros).

No solo se tiene que llevar el coche al desguace por un accidente. Cabe la posibilidad, también, de que se tenga que hacer porque no puede circular adecuadamente, al no adaptarse a la normativa vigente por antigüedad.

Según un estudio realizado por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), la nueva legislación generó que el número de coches que se llevaron al desguace ascendiera en un 20% a principios de 2022, cifra que ha seguido incrementado hasta este 2024, debido a la nueva normativa de emisiones (que prohíbe el acceso de los vehículos más contaminantes a grandes ciudades, como es el caso de Madrid o Barcelona).