Las herramientas y aplicaciones antivirus han sido diseñadas para proteger los dispositivos móviles y ordenadores de los usuarios frente a las amenazas que suponen algunos de los diferentes tipos de malware y, por consiguiente, proporcionarles una mayor seguridad a la hora de navegar por internet.
La tarea de un antivirus es detectar y eliminar el software malicioso de los dispositivos. Algunos incluso tienen la capacidad de anticiparse y de eliminar el virus antes de que éste haya infectado el sistema, gracias al análisis continuo que realizan de los ficheros y aplicaciones de los usuarios, así como de las páginas web que visitan.
La infección de los dispositivos se puede producir por diferentes vías y motivos: archivos adjuntos en correos electrónicos maliciosos, instalación de programas a los que se ha accedido a través de enlaces incluidos en emails fraudulentos, descarga de aplicaciones desde fuentes no oficiales, conexión de los dispositivos a fuentes de alimentación desconocidas (ej. cargadores públicos), etc.
A día de hoy existe un gran número de antivirus disponibles, algunos gratuitos y otros de pago. La Oficina de Seguridad del Internauta (OSI), perteneciente al Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), cuenta con un listado de antivirus gratuitos en el que detalla las características de cada uno de ellos, proporciona un manual de usuario o tutorial de uso e incluye un enlace de descarga.
Además de instalar un antivirus en todos los dispositivos, también es necesario que lleves a cabo una serie de buenas prácticas para protegerlos de este tipo de amenazas:
- Mantén siempre actualizados el sistema operativo de los dispositivos y todos los programas y aplicaciones que tengas instalados en ellos.
- Descarga las aplicaciones desde las tiendas oficiales: Google Play y App Store. Asimismo, se recomienda no descargar programas y aplicaciones que aparezcan en ventanas emergentes (pop-ups).
- Realiza copias de seguridad de tus archivos. Esta buena práctica permite recuperar la información en caso de robo o infección.
- Navega siempre en páginas web seguras (recuerda que deben comenzar por https) y mantén actualizado el navegador. Cuando el navegador de Google Chrome está desactualizado, aparece una flecha rodeada por un círculo a la derecha de la barra de navegación para notificar que es necesario actualizarlo.
- No descargues archivos adjuntos en correos electrónicos de origen desconocido o sospechoso.