Claves para reducir deudas

La fuerza de este método Snowball, o Bola de nieve, reside en ir eliminando las deudas de menor cantidad primero. O explicado de otra forma: se basa en poner un saldo extra para pagar la deuda más pequeña primero, realizando pagos mínimos en las demás hasta que esta quede eliminada. Una vez que esto suceda, el dinero que se destinaba a pagar esa deuda será dedicado a la siguiente más pequeña. Así hasta que se consiga volver a estar en números verdes.

Este método se ha posicionado como uno de los más efectivos de cara reducir deudas ya que, al estar basado en pequeños esfuerzos económicos más sencillos de aplicar, los resultados se consiguen más fácil y rápidamente, aumentando la motivación al ver cercana una resolución del problema.

• Haz una lista con todas las deudas: antes de ponerte manos a la obra, tienes que conocer de qué tipo son y cuál es el su cuantía. Además, y para que este método sea realmente efectivo, debes ordenarlas de menor a mayor para luego poder atacarlas una a una.
• Revisa los pagos mínimos mensuales: cuando hayas organizado bien todas tus deudas, tienes que revisar cuál es el pago mínimo en cada una de ellas y actualizarlo con respecto al pago que tenías antes.
• Define la cantidad del pago extra de la más pequeña: una vez tengas bien definidos los dos pasos anteriores, debes hacer cuentas y ver cuánto puedes dedicar de manera extra a la deuda más pequeña. Aquí es importante intentar asignar lo máximo que puedas, así las primeras deudas que vayas abonando desaparecerán más rápido.
• Repite la fórmula hasta que termines con tus deudas: es lo que se conoce como el método ‘Bola de nieve’ porque cada vez va aumentando más. Así, una vez que hayas pagado la totalidad de la deuda más pequeña deberás pasar a la siguiente, hasta que llegue el momento en el que hayas liquidado todas.

Como decíamos antes, en BBVA somos conscientes de que los milagros no existen. También sabemos que no es imposible salir de las malas situaciones económicas. Uno de los puntos clave a la hora de afrontar este tipo de objetivos es estar bien organizado. Para ello, y gracias a la revolución tecnológica, existen un gran número de aplicaciones que facilitan esta tarea tanto para aquellos que quieren reducir deudas como para los que quieren ahorrar.

Un ejemplo es Mi día a día, con la que puedes tener tu dinero siempre bajo control. Es intuitiva, fácil de usar y te permite ver tus ingresos y gastos ordenados por categorías, lo que te facilita la planificación y la toma de decisiones a la hora de ahorrar. También dispones de Movimientos previstos, funcionalidad que te muestra tus próximos movimientos, tanto de ingresos como de gastos (y a dos meses vista).