¿Cuánto cuesta cambiar dinero en el aeropuerto?

Si hay un lugar en el que se realizan este tipo de operaciones de cambio de dinero es el aeropuerto. Y es que, muchos de los viajeros que se desplazan a diario (por ocio o por trabajo) por sus instalaciones tienen como destino un país en el que la moneda es diferente y, por ello, deben adaptarse, cambiando la suya por la que van a necesitar (para poder pagar a su llegada). 

En este artículo, y con detalle, se explica si se puede cambiar dinero en el aeropuerto, para los que tengan la duda, y, de serlo, dónde es posible hacerlo y cuánto cuesta. ¡Sigue leyendo!

Una vez se tiene claro que se puede cambiar dinero en el aeropuerto, lo siguiente es saber dónde hacerlo. 

Existen emplazamientos, llamados ‘casas u oficinas de cambio’, situados en determinadas zonas del aeropuerto, en los que se realizan estas operaciones. Lo normal es encontrarlas, por ejemplo, en puntos cercanos a la zona de embarque o en el ‘hall’ al que se accede nada más salir del avión (u otros espacios en los que la afluencia es alta, como la zona de recogida del equipaje).

En definitiva, a la hora de cambiar dinero en un aeropuerto, existen una serie de ‘pros’ y de ‘contras’ que conviene conocer:

Ventajas de cambiar dinero en un aeropuerto

• La localización de las oficinas de cambio es óptima.
• El servicio es cómodo y seguro.
• El horario de apertura es amplio (lo normal es que esté abierta si hay vuelos).

Desventajas de cambiar dinero en un aeropuerto

• El precio de la operación es más alto.
• En horarios de máxima afluencia, es común que se esperen colas.

Si, sabido lo anterior, se opta por no cambiar el dinero en el aeropuerto, se puede: acudir al banco (eso sí, hay que ser previsor y hacerlo antes de viajar), a una casa de cambio (se encuentran en los lugares más concurridos de las grandes ciudades y, aunque de menor cuantía, también aplican un tipo de cambio en la operación) o, si se prefiere, no llevar dinero y pagar con tarjeta o retirar el efectivo en un cajero del país de destino.

Si se opta por esto último, no hay que olvidar que se suele cobrar una comisión:

• Por realizar este procedimiento: es aquella que se paga por la retirada de dinero en sí (habitualmente se cobra si se hace en un cajero que no es de la entidad de la tarjeta).
• Por el “tipo de cambio”: es la que se cobra por el valor diferente que tienen las divisas que se van a cambiar.
• Por el cambio de divisa: es el coste que se abona por la realización del proceso de conversión. 

El porcentaje, de todas ellas, es dependiente de la entidad bancaria. 

A las ya mencionadas se sumaría, aunque solo en algunos bancos, el cobro de la llamada ‘surcharge fee” (o ‘tasa de recargo’).

De estas comisiones es posible ahorrarse la comisión por retirada de efectivo fuera de España y la comisión por cambio de divisa con el Pack Viajes de BBVA, eligiendo cualquiera de sus 3 planes adaptados al uso que se quiera hacer de la tarjeta fuera de nuestras fronteras. 

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