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¿En qué consiste la solicitud de un préstamo al banco?
La solicitud de un préstamo se traduce, en primera línea, en un acuerdo entre prestador y prestatario o cliente. En primera instancia, el prestador (la institución que da el préstamo) analiza y estudia la capacidad de pago del prestatario o cliente (aquel que toma prestado el dinero). El prestatario o cliente responde del cumplimiento de sus obligaciones (devolución del importe del préstamo y pago de intereses y comisiones bancarias) con todos sus bienes presentes y futuros. Por ello es normal que antes de dar el préstamo el banco analice los riesgos de la operación y le solicite, entre otros documentos, justificantes de sus ingresos, como puede ser la nómina.
El riesgo de la operación lo pueden determinar aspectos como los bienes adquiridos con anterioridad, el capital disponible, el historial bancario… pero sobre todo los ingresos del solicitante.
¿Qué factores se tienen en cuenta al solicitar un préstamo?
El reintegro del capital prestado y de los intereses derivados se pacta con el banco antes de firmar un préstamo. En este cálculo desempeñan un papel central tres factores esenciales: el capital prestado, el tipo de interés (TIN), la TAE y el plazo de amortización.
Todo banco estudia con detalle la capacidad del cliente y, en función de las condiciones de cada caso, establece un precio al dinero que presta (esto es el tipo de interés) que se calcula aplicando un porcentaje sobre el capital solicitado por el cliente y acuerda un plazo de amortización más o menos exigente según el riesgo de la operación.
Antes de contratar el préstamo, se debe conocer la Tasa Anual Equivalente (TAE) aplicable al préstamo. La TAE es un indicador que indica el coste total del préstamo, ya que incluye el tipo de interés, comisiones y gastos aplicables, y sirve para comparar ofertas de este producto con otras entidades.
Como hemos citado, la amortización del préstamo es otro factor clave a la hora de contratar un préstamo. En el sector financiero, existen diferentes formas de devolver el dinero que una entidad presta a sus clientes, siendo el método francés el más común (el cual consiste en que el cliente siempre pague la misma cuota mensual durante toda la vida del préstamo).
Esa cuota mensual siempre estará compuesta de dos elementos: el capital que nos han prestado, y que estamos devolviendo, y los intereses que pagamos por el dinero. Por lo tanto, y gracias al cálculo de amortización del préstamo, podemos ver cómo evoluciona esa deuda mes a mes.
¿Qué ventajas se obtienen al pedir un préstamo con nómina?
Al solicitar un préstamo, la nómina no es una condición indispensable para que sea concedido. De hecho, en BBVA te ofrecemos el préstamo rápido online sin documentos que permite obtener desde 3.000€ hasta 20.000€ sin domiciliar la nómina.
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