¿Cómo aprovechar las ventajas de las aportaciones puntuales a planes de pensiones?
Poder desgravar con la aportación a planes de pensiones es una de sus más importantes ventajas. Con las aportaciones puntuales a planes de pensiones, es más fácil acomodar tus aportaciones a los eventos o imprevistos que van surgiendo en tus finanzas personales. Si, por ejemplo, en un determinado año has tenido muchos ingresos, quizás te beneficie fiscalmente aportar más a los planes de pensiones.
Muchas personas tienen altibajos en sus ingresos; por ejemplo, aquellas cuyo sueldo tiene una parte de retribución variable muy elevada o quienes desarrollan una actividad económica que unos años da mucho dinero y otros no tanto.
En esos casos, puede que aportar lo mismo al plan de pensiones todos los años tenga menos sentido. La principal ventaja fiscal de los planes de pensiones es la reducción de la base imponible y esa rebaja puede ser más ventajosa cuando se tienen años buenos en los que la base imponible es más alta, y el tipo que se paga por ella también.
De lo que se trataría es de aprovechar las aportaciones puntuales a planes de pensiones para aportar más de lo normal los años en los que las rentas obtenidas están por encima de lo usual, y la factura fiscal que te cobrarán por ellas también será superior a lo habitual.
Por otro lado, el total de la renta que declararás en la declaración de la renta no lo sabrás hasta final del año. En ese momento, con más datos, en función de lo que haya sucedido, puedes realizar una aportación puntual al plan de pensiones más grande o más pequeña.
¿En qué te beneficia realizar aportaciones periódicas a planes de pensiones?
Las aportaciones periódicas a planes de pensiones contribuyen a la generación de unos hábitos ordenados de ahorro y puedes hacerlo desde cantidades pequeñas.
Para realizar aportaciones periódicas a planes de pensiones necesitas, en primer lugar, realizar un trabajo previo para que ahorrar sea sencillo. Tienes que pensar qué es lo que sobra y lo que falta en tu presupuesto.
Lo que puede faltar en tu presupuesto son, fundamentalmente, inversiones de futuro. Para poder llegar holgadamente cada mes a realizar aportaciones periódicas a tu plan de pensiones, es muy importante generar más ingresos. Y para poder lograrlos deberás invertir en tus estudios, en tu negocio, en tu salud, en todo aquello que fortalezca tus finanzas personales el día de mañana.
En la reflexión sobre tus gastos, los hábitos de vida que repites cotidianamente son claves. Seguramente que hay muchas actividades que realizas diariamente y que podrías acometer con menos recursos.
Además, efectuar aportaciones periódicas a planes de pensiones es una ayuda para configurar tu presupuesto. Sabiendo la cantidad periódica que pretendes realizar, es más sencillo trazar la línea que debes ahorrar.
Puedes compatibilizar aportaciones periódicas y puntuales
Ya sabes que tanto las aportaciones puntuales a planes de pensiones como las periódicas tienen sus ventajas. Según las circunstancias que vivas en cada momento, te pueden convenir más unas u otras.
Pero una posibilidad que puede ser interesante es combinar ambas formas de aportación. Por un lado, una parte con aportaciones periódicas que den mayor previsibilidad a tu presupuesto y contribuyan a una mayor disciplina en el ahorro. Y, a medida que avance el año, cuando tengas más datos sobre tu posible factura fiscal, puedes realizar una o varias aportaciones puntuales para pagar lo menos posible de IRPF.