Asegurar nuestro coche es un paso indispensable para poder disfrutar de él, no solo porque el seguro nos aporte la tranquilidad necesaria ante el supuesto de que se produzca un accidente, sino porque es obligatorio por ley para poder circular. Eso sí, antes de contratar un seguro, debemos conocer su funcionamiento, los trámites necesarios para la propia contratación y todas sus condiciones, pues de ello dependerá la cobertura que nos ofrezca y, al mismo tiempo, el precio que pagaremos. BBVA te descubre lo que necesitas saber para asegurar un coche y poder así centrar tu atención solo en la carretera.

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Documentación necesaria para la contratación

En primer lugar, para poder asegurar un coche es necesario contar con la documentación estipulada y que esta se encuentre en regla. Además de nuestro carné de conducir, también te pueden solicitar la ficha técnica del vehículo y del permiso de circulación, que es el documento oficial de la Administración que confirma que el vehículo está autorizado para circular. Asimismo, la aseguradora –aunque no siempre sucede– podría solicitarnos otro tipo de documentos:

  • Recibo del seguro anterior: normalmente solo es necesario el del último año.
  • Condiciones particulares del seguro anterior: se trata de las condiciones específicas con las que contabas en tu seguro.
  • Certificado de siniestralidad: historial de años durante los que hemos estado asegurados, junto a los partes en los que hemos sido culpables.
  • Factura de la compra del vehículo.
  • Certificado de la ITV.
  • DNI o Tarjeta de Residencia.

Calcula el precio del seguro


Antes de proceder a la contratación del seguro con la documentación que te soliciten, es más que recomendable que hayamos calculado el precio de la póliza con antelación, en busca del producto más adecuado y competitivo. Pero, ¿de qué depende el precio del seguro? Existen muchos factores, y podemos dividirlos en tres categorías:

El perfil del conductor: en este apartado se incluye la edad y, por lo tanto, la experiencia del propio conductor, lo que será crucial para establecer el precio. Asimismo, también se tiene muy en cuenta su historial de partes. Alguien que no ha sufrido siniestros durante años conseguirá un precio mucho más asequible, al igual que ocurrirá justo al revés en el caso de un historial con muchos partes.

El vehículo y sus características: sin duda, este es un factor esencial para el cálculo de la póliza. La potencia, la antigüedad y el modelo determinan cuánto pagaremos por el seguro. Si el coche tiene más caballos, la cuota será más cara, ya que las estadísticas indican que hay más posibilidades de sufrir un siniestro. Lo mismo ocurre cuando hablamos de la gama y del modelo del vehículo. Un coche con más prestaciones y, por lo tanto, más caro, incrementará el seguro, pues las reparaciones y una sustitución por posible robo serían más costosas.

El uso del vehículo: es el tercer aspecto fundamental para calcular el precio del seguro. Si el automóvil va a tener un uso profesional, la cuota subirá, ya que va a realizar más kilómetros y a una mayor exigencia, mientras que ocurre al contrario si se trata de un vehículo particular. Según las estadísticas, a más kilómetros, más probabilidades de sufrir un accidente y también tendrá más ocasiones de sufrir averías e imprevistos.

La gran pregunta: ¿a todo riesgo o a terceros?

Cuando vamos a contratar el seguro para nuestro coche, siempre surge esta cuestión. Sin duda, lo ideal es contar en todo momento con un seguro a todo riesgo que cubra no solo a otros vehículos y sus ocupantes, sino también los daños propios ocasionados al nuestro y a las personas que viajan en él. Sin embargo, son muchos los conductores que se decantan por un seguro a terceros.

Normalmente, se contrata un seguro a todo a riesgo cuando el coche es nuevo, ya que esta opción aporta la tranquilidad de sentirse respaldado ante cualquier circunstancia para costear los gastos que supondría una reparación o robo, más caros cuando el coche acaba de salir del concesionario.

Por norma general, los conductores optan por un seguro a terceros cuando el coche ya cuenta con varios años de vida. Al ser los posibles costes de reparación o robo más económicos, son muchos los que se decantan por la opción de un seguro a terceros, con una cobertura menor, aunque más barato. Al fin y al cabo, se trata de una elección muy personal que debemos sopesar para lograr el equilibrio ideal entre cobertura y precio.

¿Puedo poner el seguro a nombre de otra persona?

Es otra de las principales preguntas que muchos conductores se hacen antes de contratar el seguro, sobre todo los jóvenes con poca experiencia al volante que apuestan por poner a un familiar con larga trayectoria al volante como titular del seguro para que este sea más económico. ¿Esto es posible? La respuesta es: depende.

En este sentido, hay que diferenciar entre la figura del tomador del seguro (la persona que asume su coste y la responsabilidad de éste) y el conductor. No tienen por qué ser la misma persona, pero muchas compañías exigen que así sea si el conductor es menor de 25 años para evitar casos de fraude, ya que estas pólizas suelen tener un precio más alto. Al no tratarse de ninguna ley, cada aseguradora tomará su propia decisión en cada caso, existiendo también la opción de que el familiar sea el titular o tomador del seguro y el menor de 25 años aparezca en la póliza como segundo conductor.

Seguridad, ante todo

En resumen, lo que nunca se debe olvidar al asegurar tu coche es que la propia seguridad es lo más importante. Por supuesto, siempre es recomendable tratar de encontrar la mejor opción y al mejor precio, pero nunca sacrificando nuestra seguridad. En este caso, el dicho de “lo barato sale caro” cobra aún más sentido y puede hacer que nos arrepintamos de habernos ahorrado unos euros si la cobertura no cubre lo que necesitamos en el peor momento.

Valora al detalle todo lo que necesitas y crea un seguro personalizado que se adapte a ti. Puedes combinar las ventajas de diferentes paquetes para crear la póliza perfecta y viajar así con la tranquilidad de que todo está bajo control. Eso sí, si vas a cambiar de aseguradora, debes avisar a tu compañía actual con al menos un mes de antelación. Así que, si estás pensando en contratar un seguro, no dejes de visitar bbva.es para descubrir las diferentes posibilidades que se encuentran a tu disposición.

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