Si se está pensando en comprar un vehículo, y se aboga por la movilidad sostenible, una de las opciones disponibles que mejor se adapta a este criterio es, sin duda, el coche híbrido.
De él, y en detalle, vamos a hablar en este artículo, explicando en qué consiste, cuáles son sus tipos, cómo funciona cada uno de ellos y, por último, cuáles son las principales ventajas de un coche híbrido (para el usuario y para el medio ambiente). ¡No dejes de leer!
¿Qué es un coche híbrido?
Un coche híbrido es el que dispone de 2 tipos de motores, uno eléctrico y uno de combustión, para su desplazamiento.
Esto hace que, al combinarse el uso de 2 tipos de fuentes de energía, el vehículo necesite de una menor cantidad de combustible fósil (lo sustituye la energía eléctrica), siendo más eficiente y menos contaminante.
¿Qué tipos de coches híbridos hay?
Existen 3 tipos de coches híbridos (según el uso de la energía):
Híbrido en paralelo
Se caracteriza por un funcionamiento en el que el motor eléctrico y el de combustión están conectados y, por tanto, pueden trabajar de forma independiente o conjunta (según lo requiera la conducción) en el movimiento del coche híbrido (al estar ambos conectados con las ruedas), sin que se pueda “elegir” entre uno u otro.
Híbrido en serie
En este caso, únicamente el motor eléctrico va a mover las ruedas (es decir, solo este será el que impulse el movimiento del vehículo), empleándose el de combustible para generar la energía que “alimenta” al motor eléctrico.
Esto implica, para entenderlo bien, que el motor de combustión no se conecta con las ruedas, por lo que no produce ni ayuda en la tracción mecánica del coche híbrido. Su función, en todo momento, es proporcionar la energía que requiera el motor eléctrico.
Híbrido mixto (o combinado)
En este tipo de coche híbrido, y en común con el paralelo, ambos motores (eléctrico y de combustión) están conectados a las ruedas, facilitando el movimiento del vehículo, pero lo hacen de manera separada. Esto permite que se pueda elegir si se usa uno u otro, según se necesite, o ambos a la vez.
También es posible la categorización de los coches híbridos si se atiende a su recarga, pudiendo ser:
Híbrido enchufable (o Plug-in Hybrid Electric Vehicle)
Un coche híbrido enchufable es el que, como hace también el coche 100% eléctrico, se recarga mediante la conexión a una fuente de energía externa (en casa, en la oficina, etc.).
Híbrido no enchufable (Hybrid Electric Vehicle)
Un coche híbrido no enchufable es el que, a diferencia del anterior, no tiene la posibilidad de recargarse por “conexión externa”, por lo que utiliza el motor de combustión para que, al frenar (lo que de denomina ‘frenada regenerativa’) o en los momentos en los que se produzca una desaceleración de la velocidad, se cargue el motor eléctrico.
La importancia de la batería en un coche híbrido
¿Cómo funciona un coche híbrido?
Si bien es cierto que, como se ha avanzado, mover un coche híbrido depende del uso de un motor eléctrico y un motor de combustión, el funcionamiento de cada uno de ellos va a depender del tipo de coche híbrido que sea:
Cómo funciona un coche híbrido: en paralelo
El motor eléctrico, a pesar de estar conectado directamente a las ruedas y ser partícipe de su movimiento, no es el protagonista y sí el asistente del motor de combustión (en tareas de arranque y movimiento a velocidades bajas), siendo este último el que se encarga, la mayor parte del tiempo, de que se desplace el coche.
Cómo funciona un coche híbrido: en serie
En este caso, los papeles se intercambian, siendo el motor eléctrico el que tiene el papel principal, al ser el responsable del movimiento del vehículo, y el motor de combustión el que ayuda (a la recarga del propio motor eléctrico).
Cómo funciona un coche híbrido: mixto (o combinado)
Como indica su propio nombre, es quizás el caso más complejo, ya que no existe un protagonista… sino dos.
En este caso, el funcionamiento del coche híbrido se sustenta en ambos tipos de motores, eléctrico y de combustión, pudiéndose elegir el que mejor se adapte a cada momento de la conducción.
Lo común es que se emplee el motor eléctrico en aquellos desplazamientos que son más cortos y requieren de una velocidad más baja y el de combustión en los viajes largos (los cuales, normalmente, se hacen a más velocidad).
¿Cuáles son los beneficios de un coche híbrido?
Son varios los beneficios que se obtienen por la compra de un coche híbrido, entre los que destacan:
- Menos contaminantes: sus emisiones, si se comparan con un vehículo de combustión, son inferiores (al emitir menos gases de efecto invernadero a la atmósfera). Solo son superados por los vehículos 100% eléctricos.
- Más económicos: si bien es cierto que su precio de venta es más elevado, a medio-largo plazo ayudan a ahorrar, ya que, por ser más eficientes, el gasto que se realiza en electricidad es menor del que se haría en combustible.
- Más movilidad: disponer de una etiqueta ECO es sinónimo de poder acceder con el coche a zonas de ciudades, sobre todo céntricas, a las que otros vehículos no pueden.
- Más ventajas: por un lado, si el híbrido es enchufable, puede acceder al Plan Moves III o, de haberlas, a las ayudas y subvenciones autonómicas que haya disponibles. Además, se reduce el coste del impuesto de matriculación (en algunos casos, incluso, se anula) y se rebaja el importe del IVTM (el porcentaje depende del Ayuntamiento).