¿Qué es un aval bancario para empresa?
Un aval bancario es un contrato de compromiso mediante el que una entidad bancaria garantiza que responderá ante el beneficiario en caso de que el solicitante de dicho aval (conocido como avalado) no pueda hacerse cargo del pago del importe avalado, o bien no pueda responder de una obligación contraída con el beneficiario. Generalmente, los avales se conceden con la finalidad de garantizar la amortización de un préstamo, aunque son a menudo empleados para asegurar el cumplimiento de otras obligaciones, como la participación en un concurso o el suministro de una mercancía o servicio determinado. En general, cuando un proveedor o entidad beneficiaria exige un aval a una empresa, prefiere que éste sea bancario. El motivo por el que muchas empresas optarán por elegir este tipo de aval reside en que estos últimos presentan mayores garantías que otros avales, dado que los bancos disponen de liquidez para hacer frente a la devolución de la deuda.
La contratación de un aval mediante una entidad financiera conlleva una serie de gastos para el avalado. Generalmente, estos suelen incluir una comisión de estudio, comisión de apertura, comisión de riesgo o gastos notariales. Además, en caso de que el banco se vea en la obligación de responder en uno de los pagos, el cliente deberá devolver dicha cantidad, respetando los intereses y plazos pactados en el momento de la firma del aval.