Normalmente cuando pensamos en un Plan de Pensiones tendemos a centrarnos en las ventajas que nos aportará en un futuro más o menos próximo. Esto es importante, pues efectivamente conviene contar con una pensión que nos garantice una calidad de vida razonable de cara a la jubilación, especialmente dada nuestra actual situación. Por supuesto, alcanzar la calidad de vida deseada es una de las principales finalidades de este tipo de productos.
Pero un Plan de Pensiones es mucho más que una mirada al futuro, ya que también nos proporciona ventajas en el presente. De hecho, es un buen medio para ahorrar a tu ritmo, obteniendo además una interesante fiscalidad. Así, las aportaciones que se realizan de manera periódica o extraordinaria a un Plan de Pensiones reducen la base imponible del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, difiriendo la tributación.
Aunque por definición un Plan de Pensiones siempre resulta beneficioso para quien lo contrata, es importante encontrar el que mejor se adecue a las condiciones de cada persona, dada la amplia oferta de Planes de Pensiones que el mercado ofrece y la cantidad de particularidades y condicionantes de cada uno de ellos.