Seguro para furgonetas: ¿qué es y cómo funciona?

El seguro para furgonetas (al igual que, por ejemplo, el seguro de autocaravanas o de camper) es obligatorio al ser indispensable, para conducirlos, que se cubra la Responsabilidad Civil Obligatoria de este tipo de vehículos (por los posibles daños que se causen, en un accidente, a un tercero). 

Eso sí, ya sea porque habitualmente se utiliza con fines comerciales o profesionales  y a diario, o por que se quiera proteger la furgoneta de uso familiar o personal, lo recomendable es que el seguro para furgonetas incluya, junto a la Responsabilidad Civil, otras coberturas como, por ejemplo, la asistencia en viaje, el robo o la retirada del permiso de conducir, además del vehículo de sustitución (evitando, con este último, que se paralice la actividad de la empresa).

La primera cobertura, y fundamental, del seguro para furgonetas es la Responsabilidad Civil Obligatoria. Es la que “protege” al conductor si, siendo culpable de él, sufre un accidente con daños a terceros. 

También es importante, dada la relevancia que tiene, que se disponga de una cobertura que “salvaguarde” ante una retirada del carnet de conducir. Y es que, que lo quiten puede afectar, en gran medida, al futuro inmediato de un negocio, por lo que cubrir los gastos que deriven de su retirada (curso a realizar para recuperar el permiso de conducir, las tasas del examen, etc.) puede ser de ayuda. Además, y de cara a impedir el “cese temporal” de la actividad del negocio, es conveniente que se incorpore a la póliza el vehículo de sustitución. 

Por último, y no menos importante, se puede añadir al seguro de furgonetas una cobertura que garantice la asistencia en viaje en territorio nacional (y, si es posible, internacional) en la que se incluya un servicio de grúa (con la posibilidad de reparación en el lugar del incidente). Si no se puede atender ‘in situ’, hay que valorar que el seguro para furgonetas incluya la posibilidad de contar con una red de talleres (concertados o de libre elección) a los que acudir.

Son 3 los tipos de seguro de furgonetas que se pueden encontrar:

• Seguro para furgonetas a todo riesgo: es el más completo, ya que incluye las coberturas de las otras 2 tipologías (a terceros y a terceros ampliado) y, además, los daños propios (tanto los sufridos por el conductor como por el vehículo).
• Seguro para furgonetas a terceros: es el más básico, en contraposición con el anterior, y cuenta con la cobertura de Responsabilidad Civil y, en ocasiones, con la relativa a la asistencia en viaje o la defensa jurídica.
• Seguro para furgonetas a terceros (ampliado): un nivel intermedio, en lo que a este tipo de pólizas se refiere, ya que añade al anterior la reparación y sustitución de unas, el incendio o el robo, entre otras coberturas.

Como ocurre con el seguro de coche, o el de autocaravana, son varios los factores que influyen en el cálculo de la prima a pagar por el seguro de furgoneta. Estos son:

• Edad del conductor.
• Experiencia e historial “al volante”.
• Lugar en el que se reside.
• Uso: personal o profesional.

Estos no son los únicos “condicionantes” para dirimir el importe del seguro de furgoneta. Se encuentran, en relación al vehículo, el modelo de la furgoneta, el año de fabricación, el kilometraje (previsto) o el lugar en el que se vaya a “aparcar” (en la calle o el garaje).